Todos los alimentos envasados, en general, deberán proporcionar mediante su etiquetado información relativa a su identidad, composición, características y propiedades nutricionales, sobre la protección de la salud de los consumidores y acerca del uso seguro de los alimentos (almacenamiento, duración, etc.).
La principal finalidad de un etiquetado correcto es asegurar que el consumidor dispone de información cierta y completa sobre todos los ingredientes y sustancias presentes en los productos que consume, incluidos aquellos que podrían provocar riesgos por alergias e intolerancias. Por ello que la información sobre dichas sustancias alergénicas deberá aparecer en la lista de ingredientes de manera destacada, mediante una composición tipográfica (tipo o estilo de letra, color de fondo, etc.) que la diferencie claramente del resto de ingredientes y con un tamaño mínimo de letra. En ausencia de una lista de ingredientes debe incluirse la mención “contiene” seguida de la sustancia o producto que causa la alergia o intolerancia.
Para garantizar la información alimentaria se requiere tener en cuenta todas las formas de suministro de alimentos a los consumidores, como es el caso de la venta a distancia, por lo que cualquier producto de alimentación suministrado de esta forma debe cumplir los mismos requisitos de información que los alimentos vendidos a través del comercio tradicional.
Por lo tanto, los alimentos comercializados de manera online y mediante servicio a domicilio deberán cumplir todos los requisitos de información obligatoria en los términos que se establecen a continuación:
Las reacciones alérgicas e intolerancias alimentarias a ciertas sustancias o productos pueden resultar perjudiciales para la salud de un determinado grupo de la población, provocando en algunos casos efectos muy graves que pueden derivar incluso en la muerte.
La mejor manera de prevenir este tipo de riesgos en aquellas personas que padezcan esta afección será no consumiendo el producto que puede inducir al peligro derivado de alergias o intolerancias. Por ello que el consumidor adquiera el derecho a ser informado de forma clara y veraz.
Todas las empresas alimentarias tienen la obligación de facilitar información sobre los alimentos que vendan o suministren, con especial mención a los 14 tipos de ingredientes alergénicos indicados en la norma y que pudieran formar parte de su composición, incluso cuando hubiera la posibilidad de que pudiera contener trazas.
La Prevención de Riesgos Alimentarios relacionados con los Alérgenos implica una gestión adecuada del suministro y almacenaje de los alimentos, adecuar los procesos de trabajo con el fin de prevenir las contaminaciones cruzadas e informar adecuadamente a los consumidores.